LOGO_JCDIEZ_Mesa de trabajo 1 copia 13

Un economista observador en Atenas

CJOS8DKWoAAu4AVDesde hacía un mes tenía planificado presentar mi libro el pasado fin de semana en Lanzarote y aproveché para irme con mi familia cuatro días a una isla maravillosa que ha pasado a formar parte de mi vida gracias al Foro Global Sur que organizamos allí. Recibí la llamada de Antonio García Ferreras para decirme que emitiría Al Rojo Vivo el lunes desde Atenas y me quería allí en directo. Mi familia es sagrada, pero era un honor vivir un día histórico para Grecia y Europa y poder observar directamente la realidad.

Volé el domingo por la tarde desde Lanzarote hasta Barcelona sin conocer aún el resultado. Al llegar a Barcelona vi la apabullante victoria del NO en el referéndum. Pude ver vídeos de la fiesta en Syntagma. El vuelo a Atenas se retrasó y me dio tiempo para contestar algunas llamadas de clientes y conocidos, sobre todo de Latam que por el cambio horario aún estaban despiertos.

Ya en el vuelo escribí mi comentario semanal que por deferencia publico en abierto para mis suscriptores del blog, dedicado íntegramente a Grecia. Al llegar me esperaba un taxi. Eran las cinco de la mañana hora local, la ciudad estaba muy tranquila pero había varios sitios de comida rápida abiertos y se respiraba aún el espíritu de fiesta tras una jornada democrática histórica. Destacaban los carteles con la foto de Schaüble con el lema cinco años chupándome la sangre y pidiendo el NO.

Llegué al hotel reventado, pero sin sueño y pude ver los canales de TV internacionales en los que sólo se hablaba de Grecia. Desde mi habitación se veía la Acrópolis iluminada y la sensación que 2.500 años de historia de la civilización occidental me contemplaban.

Apenas dormí cinco horas, atendí a algunos medios que vieron por Twitter que estaba en Atenas y salí a la calle a observar. Desde el hotel hasta Syntagma -donde estaba el plató improvisado de Al Rojo Vivotodos los cajeros tenían colas salvo uno. Me acerqué, pero estaba agotado y no daba billetes. Las colas eran tranquilas y muy ordenadas. Debo reconocer que cuando se convocó el referéndum y el corralito al mismo tiempo me preocupó que pudiera haber tensión social que complicase significativamente la gestión de la crisis. Pero la sociedad griega ha dado una lección de civismo: los del sí, los del no y los que no votaron.

Pasé por las ruinas del templo de Zeus donde los turistas hacían su visita al margen de lo que había sucedido el día anterior. Frente al templo hay una calle comercial donde los turistas comían o tomaban un refrigerio en las terrazas de la calle.

El hotel estaba tomado por periodistas. No hay nada peor para un país que los medios internacionales emitan en directo. Salvo en olimpiadas y mundiales suele ser para dar malas noticias. Los medios lo dan en clave local y suelen distorsionar la realidad de lo que sucede en el país. No fue el caso de Al Rojo. De cinco invitados, dos eran griegos, dos españoles que viven y conocen muy bien la realidad de Grecia y un colombiano, pero asesor del ministerio de economía heleno.

Iba preocupado antes de llegar, pero me vengo más preocupado de Atenas. En Nueva Democracia dimitió su líder Samaras, quien formaba parte del gobierno que desde 2003 endeudó y ocultó el 10% del PIB de déficit. Sin duda, una buena noticia aunque dicen que su posible sustituto coqueteó con la dictadura de los coroneles. Veremos.

Syriza se queda sin oposición, pero con una gran contradicción interna. Como me reconoció el asesor del ministerio, son conscientes que van a aplicar más austeridad pero tienen un mandato reforzado con el referéndum en contra de la austeridad. Otra invitada era diputada de Syriza en el parlamento de Atica. La conocí en Madrid en una debate en marzo y seguía manteniendo el mismo relato antiausteridad. Le dije que en el programa electoral de Syriza prometieron un plan de estímulo fiscal de 14.000 mill, un 8% del PIB. Pero desde que llegaron han recortado 2.000 mill el gasto público y Tsipras envió a Bruselas 48 horas antes de convocar el referéndum un documento firmado con un ajuste fiscal de unos 8.000 mill, un 4,5% del PIB. Me dijo que Tsipras no creía en ese documento. O sea, los propios políticos de Syriza reconocen que los documentos que envía un gobierno electo no son fiables. Crédito viene del latín y es creer. No habrá crédito en Grecia hasta que su gobierno tenga credibilidad.

Ayer el BCE ha recortado el valor de las garantías de los bancos griegos para acceder a la liquidez, precipitando el proceso. Merkel y Hollande estuvieron diplomáticos para frenar a los duros dentro de sus países y mantienen la posibilidad de nuevas ayudas a Grecia para evitar su salida del euro. Pero Merkel fue muy clara, como acostumbra. Dijo que la última oferta de los socios era muy generosa y que es el gobierno griego el que debe mover ficha. Por lo tanto, nada ha cambiado fuera de Grecia.

Tsipras entregó la cabeza de Varoufakis como si de una ofrenda de los dioses en el Partenon se tratara. Pero Varoufakis era un zombie desde hace meses sin ningún tipo de credibilidad para negociar en Bruselas. El grave problema es que Tsipras ha perdido toda su credibilidad para negociar por su comportamiento aleatorio y desconcertante desde que ganó las elecciones y, especialmente, en las últimas semanas.

CJPLDl_WcAAq4PM

Tras el programa fuimos a visitar la Acrópolis. Hacía un calor insoportable, pero este economista observador pudo sentir la historia y la sensación de estar donde empezó todo, aunque Nietzsche dijera que empezó el desastre con la civilización occidental.

Volvimos a Syntagma y comimos en un sitio maravilloso, excelente comida griega a un precio un 30% inferior a Madrid. En la comida nuestros dos guías griegos nos contaron multitud de anécdotas. Los dos eran jóvenes y habían votado NO. Al salir del restaurante había un cajero sin colas. Este economista hizo la comprobación y sacó 40 euros a crédito.

Me encantó ir a Atenas y hablar con la gente. Como pido en mi libro, hay que volver a poner al hombre en el centro de las decisiones. En España y en el resto de Europa hemos planteado el problema griego como un partido de fútbol. Pero cuando llegas, ves personas que están desencantadas de la política y de los políticos: tanto los del NO, como los del SÍ, como los que no votaron. Están asustados pero esperanzados. Quieren creer las promesas aunque siguen sacando dinero de los bancos a pesar de que el propio Tsipras les dijo que hoy martes abriría las sucursales.

CJPiahSWIAA5d5yDurante el programa vimos las declaraciones de todos los partidos en España. El Gobierno muestra sus miedos en público, ha cambiado radicalmente su posición y ahora apoya una solución pactada. Pero en enero Rajoy fue el único líder que apoyó a Samaras en la campaña del miedo y le han vuelto a apoyar durante la campaña del referéndum en la que el SÍ de nuevo ha fracasado. Y en los últimos seis meses España y Portugal ha sido más duros que Alemania en el Eurogrupo. Si Rajoy fuera inteligente y un estadista, por el bien de nuestra querida España, no basaría su campaña en el miedo. Pero ya tenemos bastante evidencia de que Rajoy no destaca por ser inteligente.

Podemos mantiene su apoyo incondicional a Syriza a pesar de que Tsipras envió a Bruselas un ajuste fiscal de 4,5% del PIB, el doble que hizo Rajoy en 2012. Los comunistas son así, como dicen en Cuba “patria o muerte”. Iglesias acaba de hacer una entrevista internacional en la que dice que si gana las elecciones aplicará el mismo programa que Syriza en Grecia. Pero que como España tiene más peso en Europa lo conseguirá. Por suerte, las encuestas les dan 30 escaños, pero lo único que conseguirían si gobernaran es que el corralito fuera mucho más intenso.

Pedro Sánchez es el único que desde diciembre -cuando se adelantaron las elecciones griegas- ha mantenido una posición coherente y neutral. Habla de apoyar a los griegos, los del sí, los del no y los que no votaron, y tiene una posición próxima a Hollande. Pero el presidente francés no lo tiene fácil, con su partido débil en intención de voto, Le Pen apoyando el NO y Sarkozy pidiendo mano dura incluso si es necesario hasta para sacar a Grecia del euro.

Grecia tiene un problema de competitividad y de endeudamiento difícil de resolver a la vez. Si sale del euro devaluaría. pero la deuda saltaría por los aires y provocaría una depresión y más pobreza de la que ya existe, como Argentina 2001. Pero dentro del euro se les va a aplicar la misma medicina que sabemos ha fracasado desde 2010. La fuga de depósitos y el corralito han complicado todo y han precipitado el proceso con más paro y más pobreza ya irremediablemente.

Fue muy duro para un economista observador, consciente de esta compleja realidad, conversar con la gente en Grecia. Pero fue muy importante sentir el agradecimiento de la gente por nuestra proximidad y nuestro cariño. Ahora lo tengo aún más claro: en este partido yo voy con los griegos, con los del sí, con los del no y con los que no votaron. Sobre todo con los desempleados y con los jóvenes que aman su país pero que se sienten frustrados porque no les ofrecen la oportunidad de desarrollar su proyecto vital.

Como nos enseñó Keynes: cuando piensas que va a llegar lo inevitable, sucede lo imprevisto. Pero me temo que nos queda crisis griega para rato. Espero y deseo equivocarme.

P.D. A partir de hoy y hasta el 21 de julio, puedes participar en un sorteo que se ha creado para conseguir 1 de los 5 libros firmados de #LaEconomíaNoDaLaFelicidad. ¡Mucha suerte!