En las pasadas elecciones municipales el PP perdió uno de cada tres votos que obtuvo en 2011. Es un resultado similar al que registró en las pasadas elecciones europeas. La pregunta es ¿por qué si hay recuperación económica el PP sigue perdiendo votos? Hay más variables que explican el voto, especialmente la corrupción, la limitación de libertades, los impuestos, el estilo de gobierno, etcétera. Pero también hay variables económicas para explicar el comportamiento de los votantes.
En el gráfico se puede observar el gasto en inversión de las empresas, utilizando datos de ventas de grandes empresas de la Agencia Tributaria donde se concentra la mayor parte de la inversión total en nuestra querida España. Se observa como el gasto se ha desplomado un 40% desde 2008 y ha retrocedido a niveles de finales de los años noventa. El gasto sigue casi el 10% por debajo de cuando Rajoy llegó a la Moncloa. El gasto ha empezado a repuntar en 2014, pero con una intensidad raquítica, muy inferior a la pendiente que se observa en la recuperación de 1995 que fue la herencia recibida de Rajoy y Aznar.
La pregunta que surge es: si España va tan bien ¿por qué no se animan las empresas a invertir? En el siguiente gráfico tenemos parte de la respuesta. El salario medio ha caído desde 2012 cuando Rajoy aprobó su reforma laboral. Eso es la media. Si miramos los salarios por déciles en los tramos bajos, la deflación ha sido brutal y afecta especialmente a jóvenes y mujeres. Surge otra pregunta: si España va tan bien ¿por qué no suben los salarios?
Lo más preocupante es que Rajoy acaba de decir que no hay que cambiar nada en economía. Pero nuestra querida España está pidiendo a gritos un plan de inversión pública. El déficit sigue en el 6% y ha aumentado en el primer trimestre y la deuda pública crece desbocada. Por eso el plan debe ser europeo. ¿Qué ha pasado con el Plan Juncker? Y en España necesitamos un plan de largo plazo para apostar por empresas de mayor tecnología que puedan pagar mayores salarios y pasa por la educación y el conocimiento donde se han cebado los recortes de Rajoy. También necesitamos políticas activas de empleo para recolocar a millones de españoles que siguen en paro. Y políticas sociales para proteger a los que han entrado en la pobreza.
Pase lo que pase ya no da tiempo antes de las elecciones generales para cambiar está dinámica. Alea jacta est.