UNA MOCIÓN DE CENSURA TEÑIDA DE POSVERDAD, PERO DESDE LA IZQUIERDA
En 2008 comencé con este blog y la prioridad era contar la peor crisis económica mundial en ochenta años. Pero luego, a medida que el debate económico en nuestra querida España se ha ido empobreciendo, me he dedicado cada vez más a aportar datos e información para desmontar falsos mitos o posverdades, como se dice ahora con Trump.
Hace dos años el ejemplo de lucha contra la austeridad era Syriza (Grecia). Como Tsipras aplicó austeridad y rescató bancos, ahora está de moda Portugal y se pone de contra ejemplo no sólo de Rajoy, sino también de Zapatero. Ya en la campaña de las elecciones de 2016 se hablaba de un gobierno a la portuguesa para reivindicar a la izquierda y ayer Pablo Iglesias lo volvió a hacer en la moción de censura del Congreso.
DIRECTO | Las cuatro medidas que Iglesias quiere copiar del gobierno de izquierdas de Portugal https://t.co/fyqpVDnHko #MocióndeCensura pic.twitter.com/tln9KXp2bA
— EL PAÍS (@el_pais) 13 de junio de 2017
En Portugal los socialistas de Antonio Costa gobiernan en solitario y tienen pacto de legislatura con comunistas y Bloc. En España el pacto equivalente sería del PSOE con Unidos Podemos. Pero hay un pequeño matiz: en Portugal el pacto tiene mayoría absoluta en el parlamento y en España sólo suman 156 escaños (le faltarían 20 para la mayoría). Y otro matiz no menor: los socialistas portugueses sacaron un 37% de los votos, 15 puntos más que los socialistas españoles.
Pero la nueva posverdad es que Portugal se ha enfrentado a la Troika y ha acabado con la austeridad.
¿Qué ha pasado en Portugal desde 2015 con el nuevo gobierno de izquierdas?
Costa ganó las elecciones y su primera decisión fue negociar un nuevo ajuste para cumplir los objetivos de déficit en 2016, y que el gobierno de derechas había incumplido. Subió el impuesto a la gasolina y aplicó un duro recorte de casi el 30% a la inversión pública.
La segunda decisión fue sanear el sistema bancario y tuvo que recapitalizar tres bancos con dinero público. Sus socios de izquierdas no apoyaron el rescate y lo tuvo que pactar con la derecha portuguesa en el parlamento.
Del plan que dijo ayer Iglesias para luchar contra la pobreza y la desigualdad no hay noticias en Portugal (ni que haya sido aprobado). De hecho, si hubieran aumentado 2% del PIB el gasto social habría sido imposible reducir el déficit.
Iglesias ha acusado a Zapatero de recortar las pensiones, cuando las subió un 30% (y un 50% la pensión mínima). Incluso, subió la pensión mínima el 2% en 2011 en pleno proceso de ajuste, nada que ver con Rajoy que las ha congelado desde 2011.
Ayer Pablo Iglesias durante su intervención en la moción de censura alabó a Costa por subir las pensiones un 0,4% el pasado año y un 0,6% en 2017. La inflación prevista este año en Portugal estará próxima al 2%, por lo que los pensionistas portugueses perderán poder adquisitiv0 este año, igual que los españoles.
Con una inflación del 2% y la raquítica subida de #pensiones del 0,25%, en los próximos 10 años nuestros pensionistas serán un 15% + pobres pic.twitter.com/V34ex5XQqw
— José Carlos Díez (@josecdiez) 22 de marzo de 2017
Para hablar bien de Portugal y apoyar al gobierno de izquierdas no es necesario inventarse una realidad paralela
Este economista observador trabajaba en una empresa con filial en Portugal y siempre ha seguido con interés la economía portuguesa. Además, soy un amante del país, me encantan sus ciudades, sus playas, su cultura, su comida y, sobre todo, su gente amable y hospitalaria.
Sigo con admiración al gobierno de Costa que, a pesar de cumplir sus objetivos del rescate, ha subido en voto. De hecho, si hubiera elecciones hoy las encuestas le dan 15 puntos de ventaja sobre la derecha y rozaría la mayoría absoluta.
He invitado este verano a un curso que dirijo en la Universidad Menéndez Pelayo a Mario Centeno, ministro de economía portugués, para que nos explique el caso portugués y su política económica a la hora de resolver las graves cicatrices que ha dejado esta maldita crisis.
Pero para hablar bien de Portugal y apoyar al gobierno de izquierdas no es necesario inventarse una realidad paralela porque son de los nuestros. Eso es lo mismo que hace Trump cada día en su Twitter y que todos criticamos.
El pasado lunes participé en un seminario en la sede de la Comisión Europea en Madrid en el que nos presentaban su documento de reflexión y nos pedían opinión a varios economistas españoles sobre cómo profundizar en la unión económica y monetaria.
Ni una moción de censura, ni la corrupción moverán a Rajoy de su silla
Mientras algunos siguen en la antiausteridad y demonizando todo lo que suene a Europa, la Comisión propone en el documento lo mismo que este economista observador en su libro Hay Vida Después de la Crisis y en este blog: seguro de desempleo común, seguro de depósitos común, aumentar el presupuesto comunitario, tesoro único, eurobonos, un ministro de economía europeo…
En España desde 2015 las comunidades autónomas están aumentando sus presupuestos de educación y sanidad recuperando los duros recortes del 2012. El IVA crece 10% y en 2018 las comunidades dispondrán de más recursos para aumentar el gasto social (más que en Portugal).
Qué menos, en un día como hoy, recordar el daño que la Reforma Laboral del PP ha provocado en la vida de muchas personas #diadeltrabajador pic.twitter.com/pmW4U8t6Qa
— José Carlos Díez (@josecdiez) 1 de mayo de 2017
Sin duda, hay mucho por hacer: el paro sigue elevado, los empleos son precarios, los salarios no suben al ritmo de los beneficios y pierden peso en la distribución de la renta. Pero inventándonos una realidad paralela (en una moción de censura o donde sea) no saldremos la crisis.
Rajoy rodeado de corrupción en su partido gana las elecciones porque -lamentablemente- tiene más credibilidad que el resto para gestionar la economía. En 2016 ya había corrupción y ganó con una distancia de 600.000 votos más que el PSOE en diciembre del 2015.
Los datos de pobreza que omite Mariano Rajoy en su discurso https://t.co/W1jbZC2WHi vía @eldiarioes
— José Carlos Díez (@josecdiez) 13 de junio de 2017
España es el único país de los grandes que tiene aún menos empleo que en 2011. No nos apuntemos tantos inmerecidos https://t.co/2bOg2uNWCt
— José Carlos Díez (@josecdiez) 13 de junio de 2017
O la izquierda recupera un discurso económico sensato y creíble, como Costa en Portugal, o el escenario más probable es que España siga gobernada por la derecha, como acaba de suceder en Reino Unido o por el centro derecha como ha pasado en Francia.
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